El día que conocí a Benedict... (Amazing Grace)

Después de recorrer la ciudad de punta a punta en busca de uno de los pocos cines en los que se podía disfrutar de esta obra de arte obtuve una gran recompensa. Pocas veces las expectativas (que eran muy altas), no han quedado defraudadas. No me explico que tuviésemos que esperar tres años para poder verla en nuestro país (en Estados Unidos se estrenó en 2006). Es una película que tiene todo: una buena historia, música, actores, un buen director y un mejor guionista...

Sobre todo me quedo con Albert Finney, otro olvidado por el tío Oscar que tiene uno de los papeles secundarios más intensos de los últimos años. Aparte, la película tiene un equilibrio emocional que se agradece al tratar un tema tan delicado como es la abolición de la esclavitud sin caer en tópicos sentimentales y discursos baratos.

Ese día conocía además al gran Benedict Cumberbatch que le robaba la película a un limitadito Ioan Gruffurd,  que aún así aquí hacía su mejor trabajo con mucha diferencia.

Calificación: 8

A Shakespeare le gustaría

Siempre me ha parecido que Kenneth Branagh es, junto con Brian de Palma, el gran abusador de los planos secuencia. Aún así tengo que reconocer que el final de Enrique V (en mi opinión la mejor de Branagh con diferencia), es uno de los planos secuencia más redondos que he visto en mi vida.

La música de Patrick Doyle tiene mucho que ver.

Y creo que a Shakespeare le hubiese gustado.

Mis dudas sobre "Avatar"

Viendo el trailer (y sin verlo, para que voy a engañarles), mis dudas sobre Avatar -la esperada película en 3D de James Cameron que se estrenará el 18 de diciembre de 2009- siguen estando en el guión. Tengo pocas dudas de que visualmente la película será apabullante, pero eso no hace una buena película.

Es necesario ofrecer historia y personajes, y creo que en este sentido Cameron es muy limitado. Al menos así lo mostró en Titanic (una película de 11 oscar que no estuvo ni nominada al mejor guión). En otras películas suyas mejor escritas (como las dos primeras partes de Terminator y la segunda parte de Aliens), siempre contó con la colaboración de otros guionistas.

En Avatar, Cameron se ha vuelto a fiar de sí mismo escribiendo completamente el guión. Por ahora el trailer y los quince primeros minutos estrenados no hablan de otra cosa que las imágenes (de hecho en el trailer apenas hay una frase).
Veremos que sucede con las palabras...

Todo empezó con un violín

Sólo Walt Disney (con 59 nominaciones) ha sido más recordado que él en los Oscar (5 estatuillas y 45 nominaciones). John Williams, que habló de retirarse después de ganar el Oscar con La lista de Schindler, sigue en activo derrochando inspiración en cada una de sus bandas sonoras.

Y esa carrera que no acaba tuvo un comienzo que hoy he recordado: el primer Óscar que ganó con la banda sonora de El violinista sobre el tejado.



Efectivamente, Peter Weir

Totalmente de acuerdo con uno de los lectores de este blog que se referiría a Peter Weir como uno de los más grandes. Yo me quedo con Único testigo, El año en que vivimos peligrosamente y El show de Truman.

El problema es que pasa muy desapercibido: hace poco cine (no estrena desde 2003) y el que hace no se lo premian (ningún Óscar y apenas un Globo de Oro a la mejor película en 1990 por Matrimonio de conveniencia). Espero que su vuelta en 2010 con The way back (que cuenta la fuga de un gulag siberiano en 1940), suponga la consagración de este enorme director australiano.






Garci y el malabarismo de los valientes

He hablado en alguna ocasión del programa Cowboys de medianoche que dirige Luis Herrero con Eduardo Torres-Dulce y José Luis Garci (antes en la Cope ahora en esradio). En el último programa, Garci dijo algo que he pensado muchas veces: la delgada línea que separa el ridículo de la genialidad, el exito absoluto del fracaso. A propósito de Canción de cuna, Garci reflexionaba sobre lo difícil que le resultó no caer en el ridículo a partir de un texto plagado de alusiones afectivas y místicas. Y efectivamente viendo esa película me sucede algo parecido a lo que me ocurrió cuando ví La palabra de Dreyer, E.T. El extraterrestre ó casi todas las de Shyamalan (La joven del agua, El bosque ó El protegido). En esas películas el pánico porque el director estaba jugando con fuego se transformó en una catarsis final impagable.



Garci volvió a hacer brillantes equilibrios de vida y muerte con El abuelo y You´re the one. Luego he de reconocer que apenas me quedo con algunos instantes del resto de su filmografía, y con casi todos sus libros y programas de radio en los que destila una veracidad y una sensibilidad tan cercana como culta.

Escribo esto porque coincido con muchas de las críticas que se hace al "cine de Garci". Pero me parece injusto que alguien que se arriesga tanto, y que ha llegado tan lejos artísticamente, sea tan olvidado frente a otros aficionados a la cuerda floja como Almodóvar, Coixet ó Amenábar que tienen, al menos, tantas lagunas como el director de Volver a empezar.

"Amanecer" sólo hay uno

La dirigió F. W. Murnau en 1927 y hoy en día Amanecer sigue siendo cine que hace avanzar el cine por la línea correcta. Una de escenas que debería ser como un mantra para todo director de cine que quiere hacer su primera película. Una preparación necesaria antes de empezar a planificar una historia y el modo de rodarla. El séptimo arte es algo muy grande gracias a la expresividad y la riqueza de lecturas de escenas como ésta.

Calificación: 10

Todo un "toque" a Soderbergh

Con un par de narices la productora Columbia ha decidido dar por zanjado un proyecto muy avanzado. Cinco días antes de que Steven Soderbergh iniciase el rodaje de Moneyball, una película sobre la leyenda del béisbol Billy Beane que iba a protagonizar Brad Pitt, y después de haber gastado 10 millones de dolares en pre-producción, ha decidido cortar por lo sano. La razón de esta medida ha sido explicada por Amy Pascal (co-presidente de Columbia), aludiendo que la productora no estaba nada satisfecha con los importantes cambios que Soderbergh había hecho en el guión inicialmente aprobado de Steven Zaillian (al parecer divertidísimo). Soderbergh había optado por un estilo más documental que daba verdadero pánico a los productores.

Desde luego es todo un "toque" que probablemente tendrá algo que ver con que Soderbergh aburrió hasta el infinito con sus cinco horas (muy documentales y totalmente hagiográficas) dedicadas a la vida del Che Guevara.

Goldenthal y mucho hielo

Hoy en Madrid se ha acabado el verano. Ha llegado el ansiado frío. Buen momento para comentar la que debería haber sido película del verano y, en mi opinión, es una de las decepciones de los últimos años. Excepto la magnífica banda sonora de Elliot Goldenthal y un trailer apetitoso, el resto es una obra gélida, rodada a una temperatura tan baja que acaba por hacerse pesadísima.

Y eso que la historia, los actores y el director presumían una obra maestra. Pero Michael Mann ha optado por un tono distanciado que hace que la película te interese muy poco. Basta contemplar el careo en la cárcel entre Bale y Depp... O la historia de amor... Nada que ver con la intensidad magnética que Mann logró en Heat, Collateral ó El dilema. Una decepción sonora.

Calificación: 5

La chica que enseñó a silbar a Bogart

Hoy cumple 85 años Lauren Bacall. Una actriz tan limitada como su marido Humphrey, pero casi tan carismática. En la retina queda la mítica escena de Tener y no tener en que ella le pide fuego a él mientras le dice: Si me necesitas, silba.

Pero para mí su mejor interpretación fue en la ceremonia de los Oscar de 1996 cuando Juliette Binoche le birló el Oscar cantado de la noche (de hecho la actriz francesa dejó claro que ella pensaba que ese Oscar se lo llevaría la "rubia" por su interpretación en El amor tiene dos caras). Lauren mantuvo la compostura haciendo su mejor interpretación. Como compensación, la Academia concederá este año el deseado Oscar a la actriz por el conjunto de su carrera cinematográfica.

Para recordar a Lauren he encontrado la famosa escena. Ella tenía 19 años y Bogart 45, detrás de las cámaras, Howard Hawks.

Recuperando el toque

Ha vuelto el Tarantino "bueno". Algo menos ingenioso que en Pulp Fiction y Kill Bill, y mucho menos inspirado en el apartado musical (según él mismo, primero escoge la canción y luego inventa la escena). Pero el hecho es que el Tarantino de Malditos bastardos es el de la tensión que se podría masticar, de los giros narrativos imposibles e inventiva visual.

Además esta vez ha vuelto a hacer de las suyas con el trillado cine de nazis y resistencia. Y en este género ha inventado uno de los mejores personajes: el coronel nazi Hans Landa (interpretado magistralmente por Christopher Waltz, ganador del Oscar al mejor actor secundario)

El trailer es fantástico y la película notable. El remedio que necesitaba Tarantino después de la estupidez de Death Proof. Malditos bastardos logró 321 millones en taquilla (costó 70).

Calificación: 7

Misterios sin resolver

En la lista que tengo de misterios sin resolver hay uno relacionado con Casablanca. En un guión que es "EL GUIÓN" hay una frase que siempre me ha descolocado. Bogart y Bergman están en el París ocupado enamorados y abrazados. En un momento suena una explosión e Ilsa pronuncia la siguiente frase:

"¿Ha sido una bomba? ¿O es mi corazón que late por ti?"

No me negaran que la frase es digna de High School Musical 3. Desde luego es un error menor, una frase suelta (en Titanic se pasan diciendo cosas así durante 3 horas y nadie protesta). Pero siempre me ha llamado la atención que Howard Koch o uno de los Epstein fuesen capaces de escribir en el guión de Casablanca 20 ó 30 de las mejores frases de la Historia del Cine a la vez que incluían este horrible verso. Lo dicho, misterios...

Palabras de Woody

Hoy he estado viendo la última película de Woody Allen titulada Si la cosa funciona, que se estrenará el próximo 2 de octubre. Es de las de mitad de tabla... de esas que parece que el guión lo ha escrito en una servilleta durante los anuncios de la tele. Eso sí, hay que reconocer que esta vez es mucho más gracioso que en Vicky Cristina Barcelona ó Todo lo demás. Igual de caótico y caprichoso a la hora de ir de un sitio para otro sin pensar en el final (que deja bastante frío), con sensación de que ha llegado al minuto 90 y ha dicho: Tengo que acabar, que empieza la Super Bowl.

Los actores (cómo no), están estupendos, encantados de tener tanto ingenio en sus labios. Vuelve a estar Fred Astaire, y la colonoscopia, y los dardos envenenados tanto a la juventud inculta como a la ácida vejez que se cree que lo sabe todo. Lástima que algunos giros suenen a políticamente correcto. Y lástima que Woody Allen no equilibre un poco más la peli (desternillante al comienzo, sosita al final), que haga alguna pausa de vez en cuando... Sin eso la peli es divertida a ratos pero olvidable y vacía, tan relativa que acaba por distanciarte porque qué más da, todo da igual, si te convenzo de una cosa no te preocupes, te convenceré de lo contrario en la próxima frase. Para alguien que domina las palabras como Woody Allen (creo que pocos lo hacen o han hecho como él, aparte de Wilder), me deja frío este collage disperso de destellos de genialidad.

Calificación: 5

Michael Apted: el regreso

Llevaba varios años dedicándose a la televisión desde que en los 80-90 hizo algunas películas de cierto interés como Gorilas en la niebla y Nell. Ahora estrena el film histórico Amazing Grace y rueda la tercera parte de Las crónicas de Narnia: La travesía del viajero del alba. Un buen regreso de un estupendo artesano, de esos que ya quedan pocos después del hundimiento de Jon Avnet (tras un regreso de lo más fallido dirigiendo los ultimos estertores de Al Pacino) y la práctica desaparición de Phil Alden Robinson, Rob Reiner ó Andrew Davis.

Y un gran acierto el contar para el viaje de vuelta con un guionista como Steven Knight (escritor de Promesas del Este).

Homenaje al cine

He tardado tiempo en encontrarla pero la espera ha merecido la pena. Cazador blanco, corazón negro es un homenaje de Eastwood a Houston, un diálogo de genio a genio a propósito del rodaje de La reina de África que es el argumento principal de la película.

Al parecer Houston tenía más interés en cazar un elefante que en rodar la película por la que Humphrey Bogart recibiría su único Oscar.

Hay mucho cine en esta película escrita por Peter Viertel, amigo personal de Houston en su aventura africana y dirigida e interpretada por un Eastwood que en 1990 ya dirigía e interpretaba como los clásicos.

Esta escena es Eastwood en estado puro. Magnífico el doblaje de Constantino Romero.

Calificación: 7´5

La dura vuelta al cole

Septiembre no suele ser un mes fácil. La vuelta al cole, el calor que no acaba de irse. Y, en medio de todo: San Valentín sangriento (la cosa con la que he empezado el curso). Es en 3D, con lo que el vaciamiento de seres humanos (es el argumento de la peli que quieren que le haga) se ve con mejor perspectiva. La verdad es que me esperaba lo peor, pero me quedaba corto: no recuerdo nada igual desde que vi Alien contra Predator 2 ó Fred Claus.

Nada en esta peli tiene ni pies ni cabeza, sólo hay uno que destripa y otros que son destripados. Además, como el malo no abre la boca acaba siendo hasta simpático comparado con sus estúpidas víctimas.


Vamos, una delicia de la que tardaré tiempo en recuperarme. Se estrena el próximo viernes, día en el que estoy seguro que manadas de adolescentes red bull acudiran al estreno de tan jugosas desmembraciones.