Fútbol y cine: por ahora sólo amigos

Por si alguien lleva años en un planeta muy lejano advierto que hoy empieza la Eurocopa. Tres semanas de emoción, decepción y entusiasmo... La vida. Para un porcentaje de la población es un período cuesta arriba ya que todo el mundo habla de algo que les importa un bledo. Y además la tele está monopolizada por la hierba de los campos de fútbol de Polonia y Ucrania. Comprensión. Son tres semanas.

A propósito del cine y el deporte, pensaba si realmente hay una película que refleja la pasión que genera el fútbol. Y la verdad es que me vienen a la cabeza varios títulos, pero ninguno me acaba de convencer. Pienso en el baseball, un deporte que no me apasiona ni a mi ni a gran parte del continente eurocopero, y me salen tres pelis muy grandes: Moneyball, Campos de sueños y El orgullo de los yankis. ¿El boxeo? Pff, casi nada. Toro salvaje, Cinderella man, La leyenda del indomable, Rocky, Más dura será la caída, Million Dollar Baby, La fuerza de uno (por favor que alguien reedite de una maldita vez esa magnífica novela).








   

El fútbol no llega a ese grado de intimidad con el séptimo arte. Y no es que no lo haya intentado. Pero por ahora no hay romance, sólo amistad. Sin irse muy lejos Rudo y cursi, Fuera de juego, La gran final, Días de fútbol, Quiero ser como Beckham, Buscando a Eric. Personalmente me quedo con una inglesa y reciente The Damned United, un clásico: Evasión o victoria y un producto de la tierra: El fenómeno, la divertidísima película de Fernán-Gómez donde se puede ver como reliquia el antiguo estadio del Atletico de Madrid (El Metropolitano).





No hay comentarios:

Publicar un comentario