Hace unos días volví a ver el último capítulo de la segunda temporada de Sherlock. En mi opinión, el mejor. Tiene mucho del universo Nolan. Me recuerda en muchos giros a El caballero óscuro (el bien que debe de huir, morir, disfrazarse de mal para que el mundo siga teniendo cuatro coordenadas básicas) y Origen (una idea puede matarte, convertirte en la nada más absoluta).
Y lo de Moriarty es una obra de arte, eso es un "malo" y lo demás son tonterías. La inteligencia perversa que destila el personaje es de lo mejor que he podido ver una pantalla de cine y televisión. Sólo la maléfica Alice de Luther llega a ese nivel de astucia sugerente. ¡Qué ganas de ver esas dos esperadísimas terceras temporadas!
No hay comentarios:
Publicar un comentario