John M. Stahl

John M. Stahl es de esos directores invisibles que no suelen aparecer en ningún tipo de listas. Nacido en una familía judía y rusa en el actual Azerbaiyán fue director de más de 30 películas, la mayoría de ellas en Hollywood. Entre sus grandes títulos como cineasta están La usurpadora (1932), Imitación de la vida (1934), Que el cielo la juzgue o Las llaves del reino (ambas de 1945). Protagonizada por Gregory Peck, esta versión de la reconocida novela de A.J. Cronin es todo un clásico. Con un guion inmortal de Nunnally Johnson (Las tres caras de Eva, Las uvas de la ira), la película tiene 5 o 6 grandes personajes dotados de ternura y empatía con el espectador gracias a un casting ejemplar. Gregory Peck es el sacerdote de mirada amable, el sentido común y la audacia de los santos aventureros, pero también está su mejor amigo agnóstico (entrañable Thomas Mitchell), la inicialmente desconfiada Madre María Verónica (Rose Stradner), el altivo Angus Mealey (Vincent Price) o el misterioso terrateniente chino Mr. Pao (Phillip Ahn).

La película obtuvo 4 nominaciones a los Oscar (una para Gregory Peck) y, 75 años después de su estreno, sigue resultando una gran película gracias al diseño de producción, el reparto, la planificación y el sugerente libreto. 

Calificación: 8

Daniel Castro: nuestro Buster Keaton

Le conocí hace 7 años en la mejor edición del Festival de Málaga que recuerdo. Año 2013. Él presentaba una película pequeña y fantástica que había dirigido, producido, interpretado, escrito, cantado y bailado. Se titulaba Ilusión, una obra maestra del humor moderno que se ha vuelto a poner de moda con el confinamiento.